Como advierten sus autores, el error es pretender
que la ciencia divierta, porque la ciencia, a lo que aspira, es a interesar.
Entre otros muchos temas de gran interés, que me han
llevado a reflexionar y a aprender a la vez que leía, destacaría:
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La
planta, cuanto más peluda, más cojonuda.
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¿De
qué material estamos hechos?
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La
invisibilidad, ¿es posible?
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¿Qué
tienen que ver las migrañas con los terremotos? ¿Cómo predecirlas...? y otros
muchos apasionantes temas.
El lenguaje resulta sencillo y cercano, acercando al lector conceptos
científicos actuales de manera rigurosa a la vez que divertida.
El libro, cuenta además con gráficos y dibujos que
nos ayudan a visualizar lo que nos están contando.
Por todo, recomiendo su lectura a todos los amantes de la ciencia
que quieran pasar unas horas
entretenidasPor Pedro, 3º ESO
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