12/30/2021

El castillo ambulante, de Diana Winne Jones

 En mi opinión, El Castillo Ambulante es un libro que, cuando lo acabas de leer, no eres la misma


persona. Sientes un gran vacío interior y, personalmente, te llega al corazón.

Trata sobre una chica que trabaja en una sombrerería, en un mundo un tanto peculiar. Un día, resulta ser hechizada por una bruja, que le hizo cambiar el aspecto para parecer una anciana. A pesar de su situación, camina varios quilómetros para visitar a su hermana. En una de sus paradas para descansar, se encuentra con un castillo de un aspecto singular. Éste no paraba de moverse con dos patitas mecánicas. Lentamente.

Se rumoreaba que allí vivía un mago que se alimentaba de muchachas guapas, pero, a pesar de eso y por el cansancio, entró. A partir de ese punto viven muchísimas aventuras, pero hasta aquí puedo contar.

Al acabar este libro, me puse muy triste porque éste es de esos que vives una segunda vida dentro de la historia.

Tiene momentos bastante divertidos, melancólicos, neutros… y todo eso lo hace ser un libro único y, claramente, mi preferido.

Ya se habrá notado pero, obviamente, lo recomiendo por todas las razones que mencioné antes.

Por  Martina (1º ESO)


12/29/2021

El árbol de las mentiras, de Frances Hardinge

 


El padre de Faith figura muerto, pero realmente no se sabe lo que ha ocurrido. Por el lugar las habladurías no cesan diciendo que se ha suicidado, pero su hija se niega a asumirlo y se propone investigar para descubrir la verdad. Faith halla un árbol, de una rara especie, que su padre había estado escondiendo. Este árbol se alimenta de las mentiras que se le cuentan y cuyos frutos desvelan secretos.

Recomiendo este libro a aquellas personas que les guste el misterio y la intriga. Es una novela muy interesante, complementada con un meditado lenguaje y unas maravillosas ilustraciones. También lo recomiendo porque, aunque no te das cuenta, te sumerges en el relato.

Por Daniela  (1º ESO)


12/27/2021

El guardián entre le centeno, de J.D. Salinger

 


“Si realmente les interesa lo que les voy a contar, probablemente lo primero que querrán saber es dónde nací, y lo asquerosa que fue mi infancia, y qué hacían mis padres antes de tenerme a mí, y todas esas gilipolleces estilo David Copperfield, pero si quieren saber la verdad, no tengo ganas de hablar de eso.”

Holden es un adolescente neoyorkino que ha ido pasando de internado en internado después de la muerte de uno de sus hermanos, la fama repentina como escritor de otro y el nacimiento de una última. Ya son muchos los sitios de los que lo han expulsado pero se entera de que lo van a expulsar nuevamente del actual centro. La noticia, para sus padres, no iba a ser notificada hasta casi una semana después, así que cuando el chico se entera de esto decide escaparse con sus ahorros, un abrigo y poco más.

Se va por la ciudad de Nueva York, solo, pero siempre intentando no estarlo: se hospeda en un hotel y va a una sala de fiestas en la que no le sirven alcohol por ser menor de edad. Conoce a varias chicas allí, incluso baila con una, pero esta no le gusta del todo y termina marchándose. Cuando vuelve a su habitación, el portero del hotel, Maurice, le ofrece compañía femenina, la cual Holden acepta. Minutos después aparece en su habitación una chica pocos años mayor que él pero este solo pretende hablar con ella. La chica se enfada porque Holden no quiera hacer lo que contrató así que le pide el dinero para marcharse. Lo que él había acordado con Maurice es distinto a lo que la joven le pide, y esta le reclama más dinero. Holden se niega y la chica se va, pero minutos después regresa con el portero para quitarle el dinero que le falta y golpearlo. Después de esta escena, el protagonista llama a Sally, una chica con la que tiene una amistad desde hace años y a la que hace tiempo que no ve. Habla con ella y le propone escaparse juntos, pero ella se niega.

Completamente solo, Holden aparece en casa de sus padres para ver únicamente a su hermana pequeña Phoebe, quien, al descubrir que su hermano ha sido expulsado nuevamente, se enfada. Pero finalmente se entristece, le presta dinero y le cubre cuando sus padres aparecen. Holden se va sin ser visto y acude a un antiguo profesor que le ofrece dormir en su sofá, a lo que este no se niega. Cuando está durmiendo, el profesor le acaricia la cabeza, lo que hace que se despierte y se asuste. Huye de la casa por miedo a que el profesor quisiera tener relaciones con él y pasa la noche en una estación. A la mañana siguiente va en busca de su hermana, a la cual ve montada en un carrusel. Este es el primer momento en el que expresa un sentimiento de felicidad.

Para mí, esta es una gran novela, la he leído varias veces y siempre me ha parecido muy interesante el papel del protagonista. Holden es una persona rebelde, va de colegio en colegio por sus malas notas, hasta que llega a Pencey, el último internado en el que está antes de contar su historia. Antes de marcharse de allí nos habla de algunos de sus compañeros, los describe y los valora pero se centra en señalar sus fallos con respecto a su comportamiento con los demás compañeros y como persona. Cada persona que conoce Holden la describe tanto física como psicológicamente, intenta analizar a todo el mundo. Eso me parece llamativo en la novela ya que le da un enfoque más personal y nos deja ver la opinión que tiene el adolescente de las distintas personas. Otro motivo por el que me parece un personaje singular es porque durante todo el tiempo que pasa desde que se escapa del colegio hasta que lo ingresan en el hospital es que Holden está intentando todo el tiempo no estar solo. Esto lo podemos ver cuando invita a bailar a una de las chicas que conoce en el local de noche o cuando contrata a una prostituta con la que simplemente quiere mantener una conversación. Constantemente llama por teléfono a gente (amigos, familia...) por ese sentimiento de soledad.

Un aspecto muy señalado en el personaje es el reemplazo de su hermano fallecido por su hermana pequeña, Phoebe, a la que adora y admira. Siempre está pensando en ella y la visita en dos ocasiones. El vacío que dejó su hermano al morir y puede que también la ausencia de su hermano D.B., que es escritor de éxito en Hollywood, según dice Holden, prostituyéndose, es ahora rellenado con Phoebe inconscientemente.

Una de mis partes favoritas son las del salón de fiestas y el momento en el que llega al hotel y describe lo que ve a través de su ventana, a toda la gente que está actuando de manera muy extraña. La del salón me gusta porque intenta hablar con personas superficiales que solo se interesan por él cuando miente sobre haber visto a una persona famosa en el hotel. Baila con una de las chicas y le da un beso, ella lo rechaza y se enfada. Parece como si el chico quisiera haber sido mayor en ese momento.

Por Nicolás, 1º BAC